Los años de la adolescencia no son fáciles para los padres ni para los adolescentes. Los adolescentes tratan de diferenciarse de sus padres, y una forma puede ser vestirse de una manera que los padres puedan objetar. ¿La ropa es realmente inapropiada o simplemente diferente de lo que estás acostumbrado o esperas? La ropa y los peinados nuevos y, a veces, impactantes pueden ser una forma de probar una nueva identidad o una forma de encajar. La presión de los compañeros es un problema típico de los adolescentes que se manifiesta de diferentes maneras, algunas peligrosas y otras molestas. La adolescencia es una época de autoexpresión, rebelión e independencia, y eso puede causar conflictos con los padres a medida que surgen problemas de comportamiento. Hablar con su hijo adolescente sobre estos temas es una forma de comunicarle su preocupación y su comprensión.
Los padres tienen que expresar sus expectativas y valores, y poner límites a los comportamientos riesgosos y peligrosos. Los adolescentes están bajo mucha presión, pero los padres deben darles algo de espacio y permitirles expresarse de manera que no les haga daño. Como padres, no podemos esperar que nuestros hijos adolescentes sean iguales a nosotros. Es importante hablar con su hijo adolescente sobre los peligros y las consecuencias de participar en comportamientos riesgosos, pero cuando se trata de la ropa y el cabello, puede que no valga la pena discutirlo. Establezca reglas sobre lo que es un comportamiento aceptable e inaceptable junto con su hijo adolescente, y sea claro sobre los temas que no son negociables. Involucre a su adolescente en el establecimiento de limitaciones y acuerde las consecuencias. Establezca las reglas y deje en claro que las hará cumplir. Sea razonable y comprensivo, y establezca prioridades para usted y su adolescente. Pregúntese si está tratando de controlar a sus hijos adolescentes o de protegerlos. Acepte que las opiniones y gustos de su adolescente pueden ser diferentes a los suyos. Y recuerde, la comunicación, la comprensión y el compromiso son las claves para evitar conflictos innecesarios y ayudar a su adolescente a aprender a tener buen juicio.